Este proyecto aborda dos demandas nacionales clave: (a) el desarrollo de nuevas tecnologías para aprovechar la energía y reducir gases de efecto invernadero (Programa de energía y cambio climático) y (b) el diseño urbano y de vivienda para enfrentar crisis sanitarias ambientales (Programa de vivienda). Además, se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, enfocándose en la creación de infraestructuras resilientes e innovadoras, especialmente en países en desarrollo.
El proyecto se contextualiza en el impacto del cambio climático, que afecta la economía y el bienestar de las comunidades, con especial énfasis en el confort térmico de los espacios construidos, el cual se ve comprometido por el calentamiento global. Dado que la arquitectura tradicional no está preparada para estos escenarios extremos, es necesario adaptarla a través de soluciones desde la ciencia y tecnología de la construcción, incluyendo estrategias de diseño sostenible, materiales innovadores, y simulaciones computacionales.
El enfoque del proyecto se centra en la construcción 4.0, que utiliza sistemas ciber-físicos, el internet de las cosas y redes inalámbricas para desarrollar soluciones innovadoras en arquitectura. Mediante el diseño paramétrico, la fabricación digital, y la experimentación controlada, se busca adaptar las viviendas, el tipo de edificación más relevante en los asentamientos humanos, al contexto del cambio climático.